lunes, febrero 15, 2010

Duro golpe al narcotráfico.

Así se lee y se escucha en las noticias y uno piensa: "ahora sí se va acabar el tráfico de drogas", pero naranjas. Esas noticias noticias solo sirven para hacernos pensar eso, pero lo que realmente consiguen con esas noticias es perpetuar el negocio (y con eso la violencia) del narcotráfico.
No importa cuántos kilos de coca se decomisen o a cuántos narcos agarren, la coca la seguirán produciendo y todos los narcos son reemplazables, se reproducen como gremlins los cabrones. Jesús Blancornelas explica en su libro "El Cartel" que el narcotráfico existe porque la corrupción existe, sin ella, no podría sobrevivir el narcotráfico. Y esa corrupción se da a todo nivel, no solo en la policía y ejército, pero también en altos funcionarios del gobierno y también en la prensa. Por eso nos hacen pensar que estamos ganando la guerra contra el narcotráfico para que sigamos apoyándola y no nos demos cuenta que la única forma de terminar con el narcotráfico es legalizando las drogas.
Al legalizar las drogas la violencia se va a casi acabar. Cuántas muertes hay por tráfico de drogas en países en donde las drogas están reguladas? Cuántas muertes hay por tráfico de drogas en donde solo la posesión de drogas para consumo personal es penado por la ley? Esa es la diferencia.
Los conservadores argumentan que si las drogas son legales, todos van a estar fumados. Argumento tonto, acaso todos fumamos tabaco y estamos borrachos todo el tiempo? Algunos sí, pero en general, la mayoría seguimos funcionando.
Legalizar las drogas significa acabar con el modus vivendi de muchos y por eso no lo hacemos, o mejor dicho, no nos dejan hacerlo. Los narcos se quedan sin trabajo, los policías y militares corruptos se quedan sin su parte, las unidades élite de la policía y ejército especializadas contra el narcotráfico también se quedan sin trabajo. Los políticos corruptos también pierden. El negocio de las cárceles (en países en donde existen cárceles privadas) se viene al suelo. En fin, muchos pierden, el problema es que los que no tenemos nada que ver, somos a los que nos caen las balas perdidas y otras ni tan perdidas.

domingo, febrero 07, 2010

La arrogancia de los cristianos fundamentalistas

Recientemente hemos visto 2 claros ejemplos del racismo, sentimiento de superioridad y arrogancia de religiosos fundamentalistas. Primero el comentario de Pat Robertson, al decir que el terremoto en Haití fue culpa de los mismos haitianos porque hicieron un pacto con el diablo. Hay que ser estúpido para creer eso y ser un hijo de puta para decirlo. Nadie cree eso, ni Pat Robertson, pero es una forma de manipular a las masas de decerebrados que lo siguen. Metiéndole miedo a sus seguidores es como mantiene su negocio (o algunos le llaman iglesia), y hacer pactos con el señor diablo definitivamente que da miedo. El otro ejemplo, los misioneros cristianos fundamentalistas que decidieron ir a "rescatar" a unos niños haitianos. Supongamos que sus intenciones eran buenas, no solo son idiotas, pero también arrogantes al creerse superiores a las autoridades y leyes haitianas. Seguro como no los ven blancos, eso automáticamente los hace pobres, inferiores, paganos y necesitados de ser rescatados.
Por eso es que no necesitamos religiosos fundamentalistas metidos en política. La religión debe ser algo personal y quedarse en la casa. No tratar de imponer su tiranía moral en los demás. Respeto y tolerancia, eso es lo que les falta. Y los derechoides fundamentalistas utilizan a estos decerebrados para impulsar su agenda política.
Lo peor de todo es que se creen la policía moral, cuando es imposible vivir en esta tierra de la forma en que según ellos, dice su libro que deberíamos de vivir. Y como es imposible, son hipócritas. Aquí les va unos ejemplos: 1) Son pro-vida, o sea anti-aborto, pero están a favor de la pena de muerte. 2) Están a favor de la santidad del matrimonio, pero se divorcian, no quieren que los homosexuales se casen, pero cualquier borracho se puede casar con cualquier desconocido en Las Vegas.
Si Jesús existiera, perdón, viviera, sería socialista. Regresen a esta tierra, vivan decentemente sin hacerle daño a nadie, ayuden a su prójimo y relájense. Salud!